En el corazón de Málaga, en la calle José Denis Belgrano, se encuentra La Cosmopolita, un rincón gastronómico que ha sabido capturar la esencia de la cocina andaluza con un toque de modernidad. Este restaurante, dirigido por el talentoso chef Dani Carnero, es un homenaje a los sabores tradicionales, reinterpretados con maestría y creatividad.
En nuestra última visita, dos comensales nos adentramos en un viaje culinario que comenzó con la emblemática ensaladilla rusa. Este plato, que en La Cosmopolita se sirve templado y coronado con taquitos de jamón, es una oda a la sencillez bien ejecutada. Cada bocado nos transportaba a la infancia, con la cremosidad de la mayonesa casera y la textura perfecta de las patatas y zanahorias cocidas al punto.
Disfrutamos del mollete de atún rojo, una creación que combina la tradición del pan andaluz con la exquisitez del atún rojo de la costa gaditana. El mollete, ligeramente tostado, ofrecía el soporte perfecto para el atún, que se deshacía en la boca con cada mordisco, dejando un sabor profundo y satisfactorio.
El siguiente plato en nuestra travesía fue el calamar encebollado, una delicia que combina la suavidad del calamar con el dulzor de la cebolla caramelizada. Aromatizado con un toque de azafrán, este plato es un claro ejemplo de cómo los ingredientes más humildes pueden transformarse en una experiencia gastronómica sublime.
Terminamos con las mollejas con espinacas y alcaparras, un plato que destaca por su equilibrio de sabores y texturas. Las mollejas, tiernas y jugosas, se complementaban a la perfección con la frescura de las espinacas y el toque ácido de las alcaparras, creando una armonía en el paladar que nos dejó gratamente sorprendidos.
La Cosmopolita no es solo un restaurante, es un lugar donde cada plato cuenta una historia, donde la tradición y la innovación se dan la mano para ofrecer una experiencia culinaria inolvidable. Sin duda, un destino imprescindible para los amantes de la buena mesa que visiten Málaga.
