Casa Daniel

Hemos Comido…en Bodegón Casa Daniel, un día de un horroroso calor en toda la provincia de Cantabria.

Abril 2011. Me acerqué a Liérganes a hacer unas diligencias relativas a nuetra web y al terminar ya bastante tarde y estando con las V Jornadas Gastronómicas Valles Pasiegos, decidí ir a probar suerte a Cada Daniel, con lo bueno que hacía estaba claro que había que ir a la terraza.

Una vez montada la mesa me trasladaron la carta y rapidamente decidí, la verdad es que había bastante gente comiendo. De primero calamares rellenos, estaba claro por el relleno que eran caseros, pero estaban completamente insulsos, una auténtica decepción, no es que estuvieran malos pero no sabían absolutamente a nada.

De segundo tomé cabrito a la cazuela, un guiso tradicional cántabro. Este sí que estaba bueno de sabor, acompañado de patatas fritas y con una buena salsa, una buena ración, compensó la decepción anterior pues estaba buenísimo.

El servicio muy diligente y servicial, también tomé una copa de vino con la comida.

Hemos Comido…en el restaurante Bodegón Casa Daniel, se encuentra en pleno casco histórico de Liérganes, ocupando un edificio típico construido con piedras de sillería y vigas de madera en el siglo XIX.

La casona en la que se ubica el establecimiento regentado desde 1971 por Daniel Agudo, un profesional de la hostelería con gran experiencia, fue restaurada en 2004 y su decoración interior es de estilo clásico, con predominio de las maderas nobles pero sin olvidar unos toques ornamentales modernos. Como no podía ser de otra forma y teniendo la ubicacion del restaurante Bodegón Casa Daniel, una de las especialidades que no pueden faltar en su oferta gastronómica son los populares churros con chocolate, que son elaborados de manera artesanal con productos de primera calidad y aceite de oliva.

El restaurante ofrece en su carta especialidades como ensalada de bacalao con ali oli sobre pimientos y anchoas, revuelto de morcilla con piñones y pasas, merluza, rape, bacalao relleno de marisco en salsa verde, bacalao Casa Daniel, lengua rebozada o con tomate, carnes de la zona, chuletillas de lechal, lechazo al horno y cochinillo (ambos por encargo) y una amplia variedad de postres caseros, entre los que destaca el hojaldre casero.

Si por algo es conocido el restaurante Bodegón Casa Daniel es por la amplia variedad de picoteo, donde no faltan excelentes tablas de ibéricos, cecina de León, jamón, rabas, salteado de mollejas de lechazo con setas de cardo, croquetas caseras, pulpo a la gallega, almejas a la marinera o a la sartén y cazuelas variadas como callos, asadurilla de lechal, chipirón relleno Casa Daniel o pimientos rellenos de carne picada, jamón y huevo cocido.

Al llegar nos encontramos con la posibilidad de comer en el salón o la terraza y aunque el tiempo estaba bien, decidimos pasar dentro. El lugar nos lo habia recomendado un amigo conocedor de todos los entresijos de la provincia Fonso. Al entrar vimos que el local estaba lleno de gente y esto siempre es sinónimo de buena señal ya que de entrada vimos que el menú parecía bueno y el precio estaba bien.

Una vez dentro observé en la ventana que era un restaurante de 2 tenedores con lo que ya llegué a la conclusión de que en principio comeríamos bien y la verdad fue que no nos equivocamos. El menú a parte de tener buen precio daba donde elegir y además fue acompañado de buena presentación y calidad. Para empezar elegimos un plato de pasta a la marinera y una especie de pates de diversas cosas que estaban bastante buenos y tras esto elegimos comer pescado que en este caso fue un sapito que estaba rico acompañado de su guarnición y todo con muy buen aspecto. A la hora del postre también había varias posibilidades y yo me quedé con el queso fresco con membrillo que estaba muy bueno.

El precio inmejorable, un sitio perfecto acompañado de unas buenas raciones, una buena preparación y un precio magnífico.