Acercarse a ver a Sergio es siempre un espectáculo, él por sí solo es un espectáculo. Y su cocina cuétana es insuperable.
Me río como si no hubiera un mañana y disfruto de su cocina como nadie. Voy a dividr este articulo en dos paso, un primero lo que se ve en la cocina y un segundo, la comanda.
Lo que se ve en la cocina
Por delante nuestro desfilo una ventresca de patudo, de ensueño, bueno digo una, pero era media que le habían encargado unos asiduos.
La comanda
Comenzamos el día con un escabeche de listado junto a unos pimientos recién hechos, disfrute total.
Nos invito a los tres comensales a unas de sus albóndigas que son de las mejores que conozco, una pasada, las albóndigas, con patatas fritas artesanas y una salsa que quita el sueño.
Y de aquí pasamos al guiso central de la comida la caldereta de pulpo cuétano, y esta vez estaba todavía superior a las otras dos veces que la he tomado aquí, deliciosa, la patata perfecta y un sabor excepcional a pulpo, no defrauda.
Ya íbamos bien servidos pero nos ofreció elaborarnos un tataki de listado con mojo de aguacate que resulto ser un descubrimiento, rebozado con harina de maíz y panco, un golpe fuerte de fritura y el interior rojo, superior.
Para terminar la famosa torrija de la casa, tres comensales tres sonrisas para Sergio.