Hemos Comido…en Celucos, en Casa Andrés Un tradicional de la zona de Rionansa, famoso por sus enormes raciones y por las carnes de su ganadería.
Este restaurante está un poco escondido ya que se encuentra en un pequeño pueblo, Celucos, un auténtico «rinconzuco cántabru», rodeado de casonas montañesa. Casa Andrés funciona también como hospedaje.
Está ubicado en una de esas casas de piedra con una amplia balconada bajo la cual han puesto unas mesas a modo de terraza. Al comedor se accede por el pequeño bar tienda, típico de pueblo. Ofrece muchos platos de carne.
Tomamos un menú, la verdad es que no se ve muy bien en la nota pues la foto es malisima, este vale 10, euros, pagamos aparte el vino, Lan.
De primero alubias blancas especialmente buenas y ragut de cabrito buenísimo, la carne es buenísima procedente de su propia ganadería. En los segundos filete y callos a reventar, una auténtica salvajada de tamaño pero muy bueno.
A destacar todo lo hecho en el horno, como el cabrito o el lechazo. También encontramos entrantes fríos y calientes, así como una pequeña selección de pescados.
De postre tomamos un soufflé, que es un espectáculo, lo sirven en una bandeja de metal en plan mega tarta. Consiste en una base de galleta emborrachada con orujo, sobre la que ponen un enorme trozo de helado de vainilla y lo cubren todo con clara de huevo a punto de nieve flameada con azúcar. Riquísimo.
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
 |
Por Agus