La bodega y los viñedos de La Legua se encuentran en la Finca de La Legua, una propiedad familiar que dista 6 kilómetros, una legua de Valladolid.
Una nueva cata organizada por la Asociación de Sumilleres de Cantabria en las instalaciones de la Escuela de Hostelería Las Carolinas.
En 1997, tras la regeneración y replantación del viñedo de La Legua siguiendo las pautas del cultivo moderno y del saber tradicional, se construyó la actual bodega sobre los pasadizos y los túneles de la antigua, tres veces centenaria.
Ofrecen vinos de calidad, acogidos a la D.O. Cigales, con carácter y personalidad propia. Para conseguirlo, se elaboran exclusivamente con uva de la finca La Legua, cultivada con esmero y cuidadosamente seleccionada.
La finca ocupa una extensión de 90 hectáreas 80 de ellas plantadas de viñedo. En la actualidad, Bodegas La Legua tiene una producción que ronda las 200.000 botellas, de las que 100.000 corresponden al crianza, su vino más representativo, 40.000 para el joven, otras 40.000 para el roble y 15.000 para el reserva. Además, cuenta con un parque de medio millar de barricas, el 50% de madera americana, el 40% francesa y el 10% húngara.
Uno de los aspectos más destacados de la bodega es que exporta más del 90% de su producción.
En 1968, Emeterio Fernández, buscaba una finca cercana a la capital del Pisuerga por su afición al campo y se le planteó la posibilidad de adquirir La Legua, que no dudó en comprar con el objetivo de dar un futuro profesional a uno de sus hijos, con discapacidad auditiva. Habida cuenta de la dificultad para trabajar el viñedo por la heterogeneidad del mismo, plantado de diversas variedades, visitó numerosas zonas vinícolas para aprender sobre el cultivo y arrancó las cepas y regeneró la plantación, aunque se conservan varias parcelas de cepas muy antiguas. En la actualidad, el viñedo tiene una antigüedad de en torno a 35 años, con un 85% plantado de la variedad tempranillo, un 8% garnacha y un 7% cabernet sauvignon.
En una primera etapa, el proyecto de LA LEGUA se centró exclusivamente en la elaboración de vinos tintos dentro de una Denominación de Origen como Cigales, conocida tradicionalmente por sus rosados.
A partir de 2013, comienza una nueva etapa para LA LEGUA, marcada por una sensible mejora de los procesos en viñedo y en bodega, así como por un incremento notable de la calidad de los vinos. Una etapa, marcada también especialmente por la salida al mercado del primer rosado, 7L ROSADO DE UNA NOCHE 2013, que comparte protagonismo con su primer monovarietal de garnacha, LA LEGUA GARNACHA 2013.
7L ROSADO DE UNA NOCHE: Tempranillo, Garnacha y Cabernet Sauvignon. Color Rosa mosqueta limpio y muy brillante. En nariz muy aromático con recuerdos de fresa, palote y pétalos de rosa. En boca es fresco y muy frutal con buena estructura y gran persistencia.
LA LEGUA GARNACHA: 100% Garnacha Color cereza de capa media. Intenso y limpio en nariz con recuerdos de caramelo de violeta y un fondo floral y especiado. Explosión de fruta en boca con mucha zarzamora y un toque de regaliz rojo. Taninos sedosos y buena acidez que conducen a un sabroso final.
LA LEGUA JOVEN : 100% Tempranillo. Aromas primarios vivaces y persistentes, con fuerte presencia de fruta roja fresca. Agradable y largo post-gusto.
LA LEGUA ROBLE : 100% Tempranillo. Marcadas notas de fruta roja fresca que armoniza a la perfección con sutiles aromas de vainilla y tostado de la barrica.
LA LEGUA CRIANZA : 100% Tempranillo. Color cereza. Intensos aromas varietales con notas tostadas, torrefactos y confitura de frutas. En boca es carnoso, potente y redondo con recuerdos de frutos negros maduros, muy bien integrado con la madera.
LA LEGUA RESERVA : 100% Tempranillo. Notas de fruta madura bien integradas en los tostados de la madera. La decantación deja paso a un vino vivo y complejo en boca.
LA LEGUA CAPRICHO : 100% Tempranillo. Color cereza picota con ribete teja. Complejo con aromas de madera y mermelada de frutas negras, elementos especiados de crianza y matices minerales. Potente, carnoso con recuerdo de fruta, madera y toques de cacao. Larga persistencia.
Bodegas la legua es un elemento diferenciador en las inmediaciones de Cigales, nos dio a catar uno vinos marcados por una gran calidad y una gran diferencia con todo lo elaborado en los alrededores, hasta ahora un incomprendido marcado por los prejuicios existentes en España acerca de un tinto de calidad de una denominación de origen desconocida, como Cigales. Afortunadamente esta situación está cambiando a medida que va calando la cultura del vino en España y se da paso a nuevas iniciativas marcadas por la pluralidad. Unos vinos recomendables en sus diferentes expresiones.