Hemos Comido…en Umma, un lugar al que me encanta venir, repetir de ciertas raciones únicas y que me sorprendan con las nuevas ocurrencias de Miki.
Cada vez que me acerco a comer a Umma el resultado es espectacular y esta vez no podía ser de otra manera.
Como suele ser habitual en el lugar el Gramona Imperial nos acompañó durante la comida.
Comenzamos tomando un aperitivo de mantequilla con un buen pan.
Cecina con pipas de calabaza y rúcula. Cecina de diez.
No podíamos dejar pasar la ocasión de volver a tomar la coliflor, un clásico y obligatorio de la casa. Somos adictos.
Pimientos de Isla asados, ricota, ajo tostado y focaccia. La chicha del pimiento bien gordita y con marcado sabor fuego. Deliciosos y de una calidad excepcional, nos han dejado boquiabiertos a los dos comensales.
Compartimos una caldereta de rape, acelgas, sopa de cigalas y garbanzos fritos. El descubrimiento del día. Sabroso, con un marcado sabor a pescado-marisco, un guiso con mucho sabor y textura perfecta. Una verdadera pena cuando se termina.
Boletus edulis, pil pil de patata y lima, papada de bellota y aceite de albahaca. Lo tomó el otro comensal y le encantó, un plato elegante donde el protagonista es la seta.
Sándwich de morro y pata, cebolla encurtida y mayonesa picante. Otro descubrimiento, encerrar un contundente plato en un bocadillo, apuesta segura.
Lemon pie con frutos rojos y crema de helado de albahaca.
Una sucesión de platos que ha resultado toda una exhibición de respeto al producto, criterio y elegancia.
“Umma es lo sabroso de esos platos que no puedes dejar de comer, el ruidito que te sale cunado los comes recién hechos.”