En las últimas fechas ha habido una buena cantidad de visitas a este lugar, por lo que prefiero dejar un resumen de elaboraciones de todas estas visitas a hacer unos cuantos artículos.
Pizza para celiacos, un añadido al pan que nos encanta a todos los comensales.
Alcachofas con papada ibérica. Una elaboración sublime que no nos perdernos si está en carta.
Boquerones con vinagreta de fresa y tomate. Nunca pensé en que dos frutas acompañaran tan bien a un boquerón, el término «delicioso» se queda corto.
Costilla de vacuno. Indecentemente buena.
Tataki ibérico. Sencillo y original, las mostazas son una auténtica delicia y maridan mejor que nada con esta carne; crujiente en el exterior y jugoso en el centro.
Carpaccio de gamba roja. Esto sí que es sabor a mar.
La coliflor ha resultado todo un descubrimiento en este lugar y de esta manera nos parece mucho mejor que lacada o teriyaki. Un vicio.
Pizza para celiacos, pero pizza de sardinas sin ambiguedades, la mejor pizza que conozco sin lugar a dudas.
Alcachofa confitada. Le acompaña una salsa de hongos y foie que aporta potencia al plato, exuberante.
Cocochas de bacalao con sus pieles a modo de cortezas. Las cocochas para mí son sinónimo de vicio y los puntos de cocción de Miguel son para enmarcarlos. La textura de la cococha es algo que me priva y estas sumaban puntos en todos los aspectos, textura, sabor, punto… una elaboración de diez.
Huevos eco con patatas y boletus. Algo que cenaría todas las noches, solo de pensar en ello se me dibuja una sonrisa en la cara.
Pechuga de pularda. La pularda es una manera de alimentar a una gallina para su uso gastronómico, nunca he sido un gran amigo del pollo y demás aves, pero cuando algo te sorprende de verdad hay que reconocerlo y esta elaboración de pularda me dejó boquabierto, pero no solo a mí, a todos los comensales.
Ensalada de lengua. El origen de la familia de Miguel es leonés y este es uno de los embutidos clásicos de la zona, difícil de encontrar por nuestros lares pero muy típico de León, resulta delicioso, aquí esta servido en una ensaldada.
Mejillones. Otra manera crujiente y de gran sabor de disfrutar el molusco.
Calamares guisados. Una tradicional elaboración de puerto pesquero como lo es Santander.
La carne también tiene su hueco en el restaurante, carne de calidad y en este caso de tudanca, el resultado salta a la vista.
Los vinos
A la hora de acompañar estas cuatro comidas, una de las cuales fue de dos comensales, otras dos de tres comensales y una última de cinco, lo hicimos con los siguientes vinos: De Nit de Raventós, Gramona, Friki, Frágil y Yenda Spiccata.
Los postres
Por último os dejo las facturas de las cuatro comidas. Debo aclararos que no todas las elaboraciones aparecen en este resumen, ni todos los postres.
Este año pasado ha sido muy prolífico en visitas a Umma, siempre nos ha gustado y siempre nos han atendido de maravilla a un precio de lo más ajustado. Miguel en la cocina lo hace como nadie, siempre con la bandera del producto por delante y la temporada marcando una carta en continua evolución. Creo que queda claro el porqué hemos insistido tanto este año pasado en este lugar: por las tres BBB. Está claro que vamos a seguir insistiendo.