Bolboreta es un pequeño restaurante decorado con gusto y encanto que abrió a finales del año pasado. Al frente están el chef inglés Aaron Quaife y su mujer Patricia Grandío en la sala. Se conocieron en restaurantes de Inglaterra y después trabajando con Diego Guerrero en DSTAgE. El nombre hace referencia a la mariposa, que se traduce en gallego como bolboreta. Han querido unir así los orígenes de Patricia con la pasión de la abuela de Aaron que coleccionaba mariposas. La carta es corta y de temporada, y la cambian en cada estación. Ahora acaban de presentar su menú de verano. Se articula siempre en tres aperitivos, tres entradas, tres principales y tres postres (uno son quesos).
Son preparaciones en las que mezclan sabores, con tendencia por los encurtidos. La carta de vinos es corta y va de los 29€ por un Tanuki Bob 2021 (que se vende en tienda a 17€) o un Valautín Garnacha 2021 a 26€ (que se vende en tienda a 15€), lo que hace una estupenda RCP. El pan es lo único que no hacen ellos, lo traen de Panifiesto Lavapiés, y lo acompañán de una suave mantequilla.
Comenzamos por su churro de queso que viene acompañado de una crema de queso con mermelada de cebolla morada. Con una masa muy bien frita a la que se unta la crema de queso y la mermelada, resulta un entrante muy sabroso.
Después tomamos su pescado curado con jalapeño y scraps. Una especie de ceviche. Me gustó el detalle de incorporar bolitas de pepino que le daba más frescura al plato.
Pasamos al único plato de carne que pedimos, un tartar de vaca con pickles, cubierto de patatas paja, y con raspaduras de corazón curado. Es el plato que menos me gustó. Suelo pedir steak tartar y este tenía exceso de salsa y poco sabor en la carne, además las patatas paja no ayudaban al plato.
Los principales fueron gnocchi con zanahoria encurtida y pesto de berro de agua. Un plato sencillo y bien elaborado.
Por último, coruxo (un pescado similar al rodaballo) con flor de calabacín frita e hinojo cubierto con una salsa emulsionada de las propias espinas del pescado e hinojo.
De postre una tartaleta de helado de cereza con crema aromatizada por haba tonka y pistacho. Riquísimo. Y unas gominolas de fruta caseras.
Un restaurante muy recomendable que espero tenga éxito en su propuesta. Las raciones no son abundantes lo que invita a probar sus diferentes platos. Eso sí, a su precio, unos 50 – 60€ pp.
Por Abraham (@Mr_Abraham)
Bolboreta
Ave María, 8
28012 Madrid
https://www.bolboretarestaurante.com/