Tras estudiar Enología y trabajar durante un tiempo para otras bodegas Irene volvio a Guriezo para cumplir su sueño, elaborar vinos de calidad
Comenzo la carrera de Enología en La Rioja, donde cursó un primer ciclo de ingeniería agrícola para terminar licenciándose en Enología.
Al acabar en la Rioja se fue a Australia a hacer la vendimia y a mejorar su conocimiento del inglés. A su regreso, la requirieron en Bodegas Bilbaínas para hacer una vendimia y termino trabajando diez años.
Entre tanto, en una finca en mitad del pueblo de Trebuesto y completamente cercada con muro de piedra, plantó viñas en 2014, apenas media hectárea y decidió plantar al cincuenta por ciento Riesling y Gewürztraminer.
Irene nos relata el porque de sus uvas, «La Gewürztraminer es una uva que me gusta desde que la conocí, es muy expresiva, muy alegre». Esta claro que al estar en la IGP del Vino Costa de Cantabria, no hubo dudas. La Riesling, tambien dentro de la IGP y se puede combinar muy bien con otras uvas.
En 2016, empieza a construir la bodega, en este mismo año aparecen las primeras botellas de la bodega pero hasta 2018 no empiezan a salir al mercado en pequeños lotes.
La bodega se apoya en una casa rural junto a la finca donde se situan las vides.
El area de vinificacion es de una hectárea que estuvo en explotación desde 2001, cuando se efectuó la plantación, pero que llevaba varios años abandonada.
El portfolio de Bodega Hortanza se limita a tres vinos, Hortanza (50% Riesling y 50% Gewürztraminer) y Sierra de la Vida (60% Albariño y 40% Riesling), y un espumoso, que toma como base el Hortanza y que hace la segunda fermentación en la botella por el método champenoise.
Por El Mule
