Hemos Comido..en Puente Viesgo, Restaurante El Jardín , en las Jornadas de Vegetalíssimo 2016, las décimas de esta ya consolidada cita anual con los vegetales.
El Gran Hotel Balneario de Puente Viesgo celebra sus X Jornadas de Gastronomía Verde, Vegetalíssimo, una cita gastronómica que se ha convertido ya en un clásico. El equipo de cocina del Restaurante El Jardín, rinde un homenaje a las verduras en forma de platos repletos de aromas, colores y texturas.
Vegetalíssimo llega este año con nuevos platos e incorpora algunas propuestas de ediciones anteriores renovadas para conformar una carta repleta de sugerentes elaboraciones que exaltan las cualidades y virtudes culinarias de los vegetales.
En esta décima edición de Vegetalíssimo la carta está compuesta por los siguientes platos:
Milhojas de vegetales, frutas de temporada aderezada con miel de brezo y queso de Braniza y Pas
Membrillo de tomate con queso Divirín de Villacarriedo, atún rojo en Aceite de sésamo con Pimientos de cristal y Tomates caramelizados.
Crema de Guisantes con Raviolis de Verduritas fritas
Flor de Alcachofa Confitada y Frita en Aceite de Oliva Virgen
Espárragos Blancos en Texturas (Sopa Fría, Cocido a Baja Temperatura y Fritos en Tempura)
Arroz Cremoso con Setas de Primavera y Huevo Poché Trufado
Flor de Calabacín Rellena de Verduritas Fritas en Tempura, sobre Jugo de Calabacín y Puerro
Ravioli de Coliflor Relleno de Marisco con Cigalita a la Parrilla y Caldo Suave de Ajos Tiernos
Menestra de Alcachofas, Espárragos, Habitas y Guisantes con Espuma de Patata y Virutas de Jamón
Timbal de Borrajas y Láminas de Bacalao al Pil-Pil.
Penca de Acelga con Boletus y Foie con Caldo Ligero de Garbanzos
Chalota de Berenjena a la Miel, con Alcachofas, Papada Ibérica y Foie
Como en ediciones anteriores la oferta gastronómica se complementa con oferta turística y durante las fechas que dura Vegetalíssimo, del 1 al 30 de abril, se elaboran distintas promociones.
Menú degustación vegetalissimo, compuesto por 4 platos y un postre con una precio de 39€ (iva incluido) No se incluye bodega. El menú degustación se compone de 4 platos y postres que varía semanalmente. Y esto fue por lo que nos decantamos los tres comensales presentes al primer pase de este desfile de vegetales, al que calificaría como Summa Cum Laude.
Esta vez voy a comentar dos visitas, pues han sido prácticamente seguidas. La primera una visita de comida de trabajo, donde comenzamos con una flor de alcachofa confitada y frita en aceite de oliva virgen (como aperitivo). No es la primera vez que las como y siempre que estén como estas me alegran el día, ese sabor tan característico de este cardo y esa textura tan suya. Un comienzo que presagiaba una comida como pocas.
Para mi hay en Cantabria dos jornadas gastronómicas que marcan el año y a las que procuro no faltar. Las primeras del año son La Gran Cacería, y al poco estas de Vegetalíssimo.
El siguiente del menú consistió en un membrillo de tomate con queso Divirín de Villacarriedo, atún rojo en aceite de sésamo con pimientos de cristal y tomates caramelizados. Cualesquiera de los componentes del plato por separado estaban de infarto, en conjunto culaquier adjetivo se le queda corto: los guisantes perfectos, los pimientos asados con un marcado toque a leña, el membrillo justamente ácido suavizado por el queso; lo de menos el atún, que también estaba de lujo pero quedaba eclipsado por los otros elementos. Un plato de matrícula de honor.
Flor de calabacín rellena de verduritas fritas en tempura sobre jugo de calabacín y puerro. Este plato ya es un clásico de las jornadas y ya hemos hablado de él en otras ocasiones. Esta es una de las elaboraciones más demandadas de estas jornadas junto con los espárragos en texturas.
Timbal de borrajas y láminas de bacalao al pil-pil. Un pi-lpil sutil y un bacalao suave para acompañar a un elemento tan flojo (por lo menos para mí) como la borraja. Ciertamente la borraja es algo que no me vuelve loco, pero en conjunto y en este plato se integra a la perfección. La preparación de la borraja es algo que hay que conocer para valorar el trabajo de elaboración de este plato.
Sorbete de cava y helado de té del puerto, una limpieza de boca para continuar.
Chalota de Berenjena a la miel, con alcachofas, papada ibérica y foie. Esta resultó una de las elaboraciones que más me soprendió de este menú. La berenjena sabrosa como ella sola compartiendo protagonismo con el foie y la papada, una delicia. Cada vez que veo papada en una elaboración me acuerdo de mi buen amigo Javi Hernandez, pues es algo que le apasiona.
Bola de helado de queso artesanal. Si hay algo que es típico de los Valles Pasiegos es el helado, el helado básico: el mantecado. Hay una gran tradición heladera por la zona y en este restaurante han querido seguir con ella, elaboran unos helados artesanales de chuparse los dedos y este es uno de ellos, el helado de queso.
Milhojas de almendras y crema de queso con frambuesas y helado de tiramisú. Un fin de comida delicioso, una elaboración unica.
De postre y acompañando a la charla posterior, un Señorio de Sarria Moscatel, un vino de Navarra muy peculiar, un moscatel de Grano menudo monovarietal. Elaborado mediante una breve fermentación detenida por la técnica del «apagado natural» en el momento exacto de concentración de azúcares deseados. En resumen, un vino dulce que aúna las virtudes de los mejores moscateles, sin recatarse un ápice en su goloso y justo contenido.
Por cierto, los otros dos comensales comieron con Casona Micaela, siempre presente en estas jornadas. Yo comí con una cerveza Alhambra.
Y a los dos días volvi con acompañante, a enseñarle, pues no lo conocía, lo genial de las elaboraciones de Vegetalíssimo. Este comensal es celiaco y el restaurante El Jardín saben tratar perfectamente a un enfermo de estas características, tanto desde el personal de sala como en cocina, se nota que ha habido una formación en torno a esta y a otras dolencias.
Comenzamos con un clásico de estas jornadas, la sopa de espárragos. Brutal, por mucho que la pruebe sigue pareciéndome una maravilla. Nos lo sirvieron como aperitivo.
Flor de alcachofa confitada y frita en aceite de oliva virgen (como aperitivo). Si no me lo ponen me da algo y a mi acompañante le da dos veces lo que me pudiera dar a mi. Nos gustan tanto…
Dos elaboraciones distintas para un mismo plato: membrillo de tomate con queso Divirín de Villacarriedo, atún rojo en aceite de sésamo con pimientos de cristal y tomates caramelizados. Uno con atún y el otro no, el motivo es muy sencillo: la salsa de soja en la que se marina el atún contiene gluten. Esta elaboración quería repetirla pues me sorprendió y gustó muchísimo la vez anterior y quería compartilo con mi acompañante.
Menestra de verduras Vegetalíssimo. Puntas de espárrago triguero y blanco, guisantes, alcachofa, sobre una espuma de puré de patata y todo con un punto perfecto, al dente. Si hay algo que caracteriza a estas jornadas son el punto de los vegetales, se potencia el sabor del vegetal con unas elaboracines justas, al dente.
Como en el menú anterior sorbete de cava y helado de té del puerto.
Para terminar el salado, timbal de borrajas y láminas de bacalao al pil-pil.
De postre yo tomé canutillos rellenos y acompañados de tofe y helado de queso.
Y mi acompañante frutas y queso fresco, todo exquisito.
Al final la nota, mejor relación calidad precio imposíble, instalciones de lujo, servicio IMPECABLE, pendiente y conocedor de la celiaquía, las elaboraciones y las calidades de los productos de primera, raciones generosas,. Nos fuimos deseando volver.
Por El Mule