Hemos Comido…en San Vicente de la Sonsierra en Casa Toni, mi favorito de La Rioja, después de visitar las Bogedas Ramírez de la Piscina.
Septiembre 2015. A la vuelta de un viaje de Barcelona nos coincidió la hora de la comida en La Rioja y lié a mi acompañante para visitar una bodega y comer en mi tan querido Casa Toni. Siempre que puedo le hago una visita a Mariola y Jesús, aunque a este último no haya conseguido todavía sacarle de la cocina.
La bodega que regenta Mariola es una de las más extensas de La Rioja y en la barra del restaurante puedes tomar algún que otro vino de los que ella te recomeinda o que ese día ha decidido sacar a la pizarra.
Nosotros comimos con un Vitarán Crianza 2012, por supuesto un rioja, pero no un clásico rioja. Un vino con aromas propios de la crianza en madera vainilla, moras y ciruelas. Equilibrado en boca, con gran armonía entre acidez y tanicidad, de “trago largo” y un final aromático muy limpio.
Comenzamos tomando un aperitivo bienvenida en forma de pintalabios de pepino, lipstick de pepino. Muy agradable y algo no muy habitual, polo de pepino. Lipstick en recuerdo a la película estadounidense de 1976 dirigida por Lamont Johnson, la cual significó el debut como actrices de la entonces supermodelo Margaux Hemingway y su hermana menor Mariel Hemingway, quienes acompañaron a Chris Sarandon y Anne Bancroft en los papeles estelares.
 |
 |
De primero tomé mis amadas sardinas. Es lago a lo que no me puedo resistir y que repito y repito, eleva la sardina a los altares gastronómicos con esta elaboración. Acompañadas de helado de aceite de oliva, ajoblanco y huevas. De otra galaxia.
 |
 |
Mi acompañante pidió uno esparragos, no sé si serían cojonudos, pero lo estaban, los probé.
 |
 |
El otro comensal tomó unas patatas a la riojana que según él resultaron un espectáculo.
 |
 |
Yo tomé unas manos de cerdo rellenas de foie. Una delicia como pocas y una elaboración donde tolero el foie, lo tolero y admiro.
En resumen, una comida diez, no hay nota pues invitaba el otro comensal pero los dos coincidimos en lo placentero de la ocasión.
Por El Mule