Organizado por su distribuidor en Cantabria, la familia Miméndez, que al completo se encontraba allí. Aforo completo en este recién inaugurado espacio gastronómico, El Hostal, para disfrutar de seis vinos de esta bodega.
Cuando preguntas de donde procede la bodega y te responden que de Briones, lo primero que te viene a la cabeza es !!!Ah, un Rioja!!! Nada más lejos de la realidad.
Desde que en 1995 revolucionó el panorama de los vinos riojanos con el lanzamiento de su primer Finca Allende, Miguel Ángel de Gregorio, ha crecido como profesional, consagrándose como uno de los mejores enólogos de España, capaz de dar a luz tintos de la dimensión de Calvario y Aurus dos de los más rotundos ejemplos de la grandeza de los vinos de pago en La Rioja.
«El vino se hace en la viña»; este es el pilar sobre el que gira toda la filosofía de elaboración del vino Allende. El respeto a un terroir único, la vendimia realizada a mano en el momento óptimo de maduración, la selección manual de las mejores uvas, los mulos tirando del carro entre la viñas. Cuando escuchas estas palabras de la boca de Miguel Ángel sabes que te vas a encontrar no solo con maestría a la hora de la cata sino con una gran pasión en cada copa.
La cata resulta atípica, donde nadie dirige, todos aportan, puedes comenzar por un blanco o por un tinto, lo importante es saborear el vino.
Y comenzamos con un Allende blanco de 2011. Un vino de color amarillo dorado, alimonado, con recuerdo de cítricos y ciruela Claudia, muchas notas balsámicas. Boca sabrosa, grasa, untuosa producto de su crianza en lias una gran ligereza en el paso de boca, bastante persistencia en retronasal, un blanco riojano muy atípico.
De aquí pasamos a los tintos de Finca Nueva. Finca Nueva es uno de los proyectos de Miguel Ángel de Gregorio y más concretamente, su particular taller de creación. Con él quiere ofrecer al consumidor lo que él ha bautizado como ‘vinos divertidos’, vinos frescos a un precio asequible para ser disfrutados y disfrutar en cualquier momento.
Finca Nueva crianza 2010. Un vino expresivo, muestra una nariz limpia de intensidad media-alta en la que aromas a fruta roja madura priman, ciertas notas tostadas le aportan complejidad. Nariz muy fresca. En boca repite el mismo esquema que en nariz, donde la fruta se torna más intensa, y madura dejando recuerdos a cerezas y grosellas, con sutiles notas balsámicas. Intensidad tánica media y acidez justa que aporta muchísima frescura. Un vino sabroso, fácil del beber y agradable.
Finca Nueva Reserva 2008 es de color rojo granate con reflejos ligeramente achocolatados. En nariz aparece la ciruela, el tabaco, un ligero toque de regaliz y un final fresco. En la boca tiene cuerpo, con un tanino bastante marcado apareciendo frutas maduras acompañadas de un suave aroma de madera ahumada.
Finca Allende 2008. Vino de color rojo cereza de media intensidad con ribete granatoso. En nariz es intenso con sensaciones de fruta roja y fruta negra, balsámicos y especiados, tostados coco, vainillas y fondo mineral. En boca es potente y bien estructurado, con excelente acidez, muy fresco, finos tostados sin tapar la fruta, con final seco, afrutado y mineral.
Calvario 2007. Tiene una crianza de 16 meses en barrica bordelesa de roble francés nuevo, recibiendo un trasiego cada 6 meses. Se ha embotellado sin clarificar ni filtrar. Rojo intenso con matices Cárdenos, poderoso. En Nariz, recuerdos de montebajo y balsámicos, frutos negros y compota unidos a recuerdos minerales. Gran armonía en boca, taninosequilibrados, paso de boca suave y voluminoso, final de boca largo.
Procedencia de Briones finca Calvario, Plantado en 1945, plantación de alta densidad. Con poda en vaso. Suelos franco arcilloso con abundantes gravas y piedras. Cultivo sostenible respetuoso con el medio ambiente y siguiendo los ciclos naturales de la planta , con abonado y orgánico y laboreo mecánico sin utilización de herbicidas. Vendimia manual y posterior selección manual de racimos a la entrada a bodega.
Veinticuatro meses en Barricas bordelesas de Roble Francés nuevas. Trasiego cada cuatro meses. Embotellado sin filtración ni clarificación. Color rojo púrpura intenso. Potente con una gran complejidad aromática, minerales, especias, monte bajo, tofee y cacao. Gran armonía en boca con unos taninos dulces muy marcados, pleno de sabores de frutos negros, pasa, regaliz y hierbas aromáticas. Final de boca largo y persistente.
Procedencia de Briones edad media del viñedo 60 años, plantación de alta densidad. Con poda en vaso. Suelos franco arcilloso con abundantes gravas y piedras. Cultivo sostenible respetuoso con el medio ambiente y siguiendo los ciclos naturales de la planta , con abonado y orgánico y laboreo mecánico sin utilización de herbicidas. Vendimia manual y posterior selección manual de racimos a la entrada a bodega.
Parece ser que con el tiempo se van desechando esos antiguos «tablones», vinos con desproporcionado sabor a madera, se deshomogeinizan los vinos de Rioja y se da paso a la infinita riqueza de sabores que aporta el vino de pago o terroir, lo que deberían ser los vinos, vinos hechos en la vid.
Estos racimos que podeis ver son de el lugar donde se celebró la cata, El Hostal, me llamaron la atención y los fotografié.