Hemos Comido…en el Marucho, redescubrí un clásico, que está en los alrededores de casa y que tiene una carta prácticamente apta al completo para celiacos, les da muchas papeletas para que no salgamos de sus instalaciones.
Octubre 2016. Si a eso le añades que tiene un cava de los que habitualmente consumimos, así que nos encontramos aquí cada dos por tres, si no es comiendo, es picoteando algo en la barra, pero esta vez tocaba comida.
Una de mis raciones favoritas de este lugar y algo cada vez más escaso en las cartas de los restaurantes de Santander, las huevas, encima como a mí más me gustan en vinagreta, la clásica hueva de merluza, otras huevas como las de sarda me gustan más fritas, pero esas como las sirven aquí cocidas y en vinagreta, todo un acierto y una buena ración.
Bocartes rebozados, utilizando harina de maiz sin gluten, buenísimos, bocarte de tamaño terciado y con un punto jugoso.
Albóndigas de rape, también para celiacos, jugosas, sabrosas y una ración de buen tamaño.
El comensal celiaco tomó lubina a la plancha, muy bien de punto y completamente a su gusto según su criterio.
De postre la tarta de Santiago también apta para celiacos.
Yo tomé de postre un tocino de cielo con chantilly, muy bueno.
Y al final la cuenta, una buena relación calidad precio, la atención del servicio como siempre excelente, pendientes en todo momento.
