Hemos Comido…en El Cruce en Vega de Pas un lugar por el que tengo cierta debilidad, quizás me vienen recuerdos de mi infancia pues nos solíamos acercar con mi padre aquí a comer. Cuando llegar a Vega de Pas era casi una aventura digna de National Geografics.
Marzo 2017. En aquel entonces mi padre tenía un Renault Gordini que había comprado en Valencia y que se había traido desde allí, no sé lo que tardó pero más de un día y de dos, además le acompañaba un tío mío y debieron de venir parando en todos los «humilladeros». Por aquel entonces llegar a Vega llebaba un buen rato y siempre comíamos aquí o en el México, que ya no existe.
En esta ocasión el artículo hace referencia a dos visitas. La primera una mía a probar el cocido montañés que bordan en este lugar y la segunda por su paso a la final por parte de Yeyo Rubindecelis Lanza, amigo mío desde niño pues íbamos al mismo curso del mismo colegio, los Capuchinos.
El cocido ciertamente que lo hacen de maravilla, acompañado de carne de su matanza y un justo toque de berza, siempre reposado de un día para otro. No puedo decir más, si lo probais compartireis conmigo que pocos se elaboran como él, el paseo hasta Vega se hace mucho más llevadero si terminas con un cocido.
Yeyo llebaba más hambre que yo y se quedó a comer, casi nada, un segundo plato de régimen, unos filetes de lomo con torreznos y patatas. Según me dijo que para levitar de buenos.
En fin, todo sigue donde lo dejé hace unos años, buenos cocidos, buenas carnes y para finalizar la pasiega más conocida, una quesada, de postre.