Hemos Comido…en una de las ermitas la situada en Puente San Miguel, este establecimiento es uno de los más clásicos de la zona para comer aunque sus dueños han sabido adaptarse a los tiempos.
Sus propietarios son los hermanos Salmon Garcia de los salmones, que también regentan otro restaurante en la localidad de San Pedro de Rudaguera, bastante cercano a Puente San Miguel y de nombre también La Ermita. Su nombre procede de los restos de una antigua ermita cercana al establecimiento. Su joven chef, Sergio Ruiz Obregon muestra una gran preocupación por la mejora constante de sus platos. Entre ellos destacan las mollejas salteadas con chalota de setas o el solomillo al oporto con láminas de Foie gras. Entre sus especialidades podemos destacar Puerros rellenos de jamón con salsa de setas, carrilleras de merluza con salsa de piquillos, arroz cremosos, magret de pato en costra de sésamo con puré de manzana y salsa de oporto.
Agosto 2011. La gente no termina de entender que por muy bueno que haga a mí no me gusta comer en las terrazas, primero porque no me apetece lo mas mínimo hacer de escaparate, segundo en la mayoría de los casos surge alguien que te chafa la comida y tercero no tengo por qué incluir en la comida parte del medioambiente ni sufrir los rigores climáticos.
Bueno pues lo primero que surgió fue este asunto, que quería comer en el local hasta aquí bien llego un momento en que lo entendieron, pero cuando les dije que quería comer de carta, no hubo manera que si el comedor estaba muy vacío, que si en la parte de abajo, que si en la terraza, bueno pues al final termine comiendo de menú ya que no me querían servir de carta.
Termine en este restaurante pues había quedado en Cienvinos y al acercarme al lugar me encuentro con que está cerrado y que en un letrero pone que se han desplazado a La ermita en Puente San Miguel, pues cambie de lugar la cita y rumbo a Puente San Miguel.
Una vez en este bello pueblo de Cantabria me encuentro que los anteriores propietarios de la Ermita han alquilado el local y ahora parece ser que se dedican a otros menesteres.
El local tiene tres comedores, uno en la parte baja para menú, donde me situaron, otro en el primer piso comedor de carta y la terraza.
Al final no puedo contar mucho sobre el lugar pues casi me obligaron a tomar el menú del día, por cierto muy bueno pero un poco basto, de primeros macarrones, cocido montañés, rissoto de presa y hongos. De segundos, filete a la plancha, revuelto de gulas y no me acuerdo de más.
Yo tome el risotto por cierto excepcional y el filete, normalito, con unas patatas normalitas y unos pimientos de bote normalitos, vamos un menú normalito con un precio bueno.