Hemos Comido…en Puente Arce en Tinín, un clásico del lugar donde me traía mi padre de crío a tomar asadurilla.
Febrero 2015. Hacía un montón de años que no me acercaba a este local. La primera vez vine con mi padre en un Renault Ondini, recién comprado a estrenarlo. Recuerdo que lo llevaban dos hermanos y que las botellas se enfriaban en una derivación del regato que pasa por detras de la casa, que habían encauzado a través de unas fresqueras donde guardaban los vinos y refrescos, siempre frescos por la acción del agua del río.
En esta ocasión me tocó invitar a dos amigos del trabajo, siempre celebramos nuestro cumpleaños en conjunto y siempre en un sitio distinto. Uno de ellos es vecino y residente en Puente Arce, conoce a los dueños, además suele comer habitualmente y le gusta el sitio, así que allí nos dirigimos a investigar.
Llegamos antes dos de los tres comensales y mientras esperábamos nos tomamos una cañita.
La cañita nos la animaron con un buen caldo caliente y una<s tapas de morcilla. La barra estaba llena de tapas a disposición de la parroquia. Por cierto, hablando de parroquia, esta resultó ser bastante numerosa, tanto en la barra como en el comedor, síntoma de la bondad del lugar.
Una vez llevado a buen término el aperitivo, nos dirigimos al comedor a tomar uno de los menús de 8 € que oferta el restaurante, un precio a todas luces inmejorable. Ya solo nos faltaban los aparatados elección de la comida y degustación.
Lo otros dos comensales tomaron arroz con salchichas, con muy buena pinta, los comensales coincidieron en lo bueno del guiso.
Yo tomé una menestra de verduras, buenas verduras frescas, un buen punto de cocción y un excelente sabor. Había judías, alcachofas, alguna zanahoria y dados de jamón. Hacía tiempo que no tomaba una menestra, me gustó.
Una vez dada buena cuenta del primer plato pasamos a lo segundos, cada uno tomamos uno diferente. Uno de los comensales tomó filete, bastante bueno y de buena pinta, le gustó.
Otro comensal pechuga de pollo, también le gustó y lo comentó.
Yo tomé filete de lomo adobado. Un filete de buen grosor, muy bien hecho ni super hecho ni crudo, acompañado de unas patatas artesanas.
Ninguno de los comensales tomamos postre, pues se nos hacía tarde y ya estabamos servidos en cantidad.
Buena cocina casera y un menu que más justo imposible en precio, aunque bien hecho y generoso. Por cierto, en la nota está lo de la barra, como podeis comprobar ventinueve no es divisible entre tres. Tenemos que volver a ver si siguen haciendo esa asadurilla que tanto le gustaba a mi padre.
San Julián 2-A 39478 Puente Arce 942575326