En la filosofía griega, kairós representa el “momento oportuno”, el instante preciso para actuar. Para los sofistas, era una clave en la retórica: saber adaptarse al contexto y aprovechar el tiempo adecuado. En el ámbito culinario, este concepto adquiere una nueva dimensión: el arte de cocinar (y comer) en el momento justo, con ingredientes de temporada, técnicas bien aplicadas y respeto por la memoria del paladar.

Muriedas Kairós

Muriedas Kairós

Muriedas Kairós

Muriedas Kairós

Muriedas Kairós

La propuesta gastronómica del chef Andrés Saiz

La carta de Kairós, diseñada por el chef Andrés Saiz, se estructura en tres grandes apartados:

  • Para Comenzar
  • En la Brasa
  • Postres Caseros

La carta me pareció una de tantas, a esto se suma un menú del día por 18,90, que es precisamente la opción que elegí durante mi visita.

Guiso del día: tradición con fondo

alubias con langostinos

alubias con langostinos

El menú se abría con un guiso del día: alubias con langostinos. Una combinación sencilla pero efectiva. El sabor del caldo era excelente, con ese punto de cocción que denota mimo y experiencia. La ración me pareció algo escueta, aunque personalmente prefiero calidad en lugar de cantidad excesiva.

Potas encebolladas: cocina con memoria

Potas encebolladas

Potas encebolladas

Como segundo, llegaron las potas encebolladas. Este cefalópodo, muchas veces infravalorado frente al calamar, tiene su propia personalidad. En este caso, no solo me convenció por su sabor, sino por el recuerdo que evocó: así las cocinaban mis abuelos. En su casa las acompañaban con arroz, mientras que aquí venían con patatas fritas. Una pequeña diferencia que no alteró el efecto emocional del plato. Las potas también me gustan mucho fritas, al estilo rabas, pero esa es otra historia…

Factura

No tomé postre porque simplemente no me apetecía, y acompañé la comida con agua y café. El servicio fue eficiente y amable, sencillo pero acertado.

Por El Mule

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