La lubina, róbalo o sabalo (Dicentrarchus labrax) es una especie de pez perciforme de la familia Moronidae. Es propia del Cantabrico, mar Mediterráneo y el océano Atlántico, desde las costas africanas (Senegal) hasta Noruega.
Este pescado es muy apreciado por su valor culinario y en la pesca deportiva. En la costa suroeste atlántica española, también se le denomína baila, tanto a esta especie como a Dicentrarchus punctatus, de menor tamaño. No se reconocen subespecies.
El nombre de lubina procede del latín lupus, lobo, y los Romanos lo llamaron así debido a su gran voracidad. Aparte de como Lubina, en España, se le conoce otros nombres:
Andalucía: Robalo, Magallón. / Asturias: Robaliza, Robaloa. / Baleares: Llop. / Canarias: Robalo, Salmón de altura. / Cantábria: Robaliza / Cataluña: Llobarro / Galicia: Robaliza, Robalo / Euskadi: Luoi, Lupiyá, Lupiniá / Valencia: Llobarro, Llop, Llobina.
Caracteristicas :
Su color de la espalda va de un gris-oscuro a un tono verdoso-aceitunado, y parece que la diferente tonalidad se debe a si frecuenta fondos pedregosos o fondos de arena. Los lados son más claros, mejor dicho, plateados y el vientre blanco brillante, lo que le da un aspecto general grisáceo.
En los jóvenes que no sobrepasan los 10 cm. de longitud se les puede distinguir pequeñas manchas negras en la espalda, pero que desaparecerán con la edad. Las aletas dorsales, anales, caudales son oscuras, mientras que las pectorales y las ventrales son claras. La cabeza es oscura con una mancha negra sobre la parte superior de los opérculos, y con dos escamas cicloides cortante.
La lubina posee dos aletas dorsales separadas. La primera tiene ocho o nueve rayos espinosos, y la segunda está dotada de una primera espinosa seguida de doce o trece rayos blandos. Los rayos de la aleta anal son cortos, duros y muy afilados. La caudal, muy hundida, formada por diecisiete rayos blandos. Las ventrales solo tienen un rayos espinoso, estando las pectorales constituidas por quince o dieciséis rayos transparentes.
Las hembras tienen el morro más puntiagudo que los machos, y con una silueta más rechoncha, más alta, por lo que los machos parecen más delgados. La mandíbula inferior sobresale más que la superior en ambos sexos. Tienen una boca grande que al abrirse nos muestra unos labios amplios y, a la vez, frágiles.
La línea lateral, va desde la parte central de la aleta caudal hasta la altura de los ojos, curvándose ligeramente.
Vida y costumbres
Vive en zonas donde tiene que soportar una amplia gama de temperaturas, siendo capaz de sobrevivir en aguas frías de hasta 2°C. y calientes de hasta 32°C.. Deja de alimentase por debajo de los 7°C., y su crecimiento se detiene por debajo de 10°C.. Su temperatura ideal está entre 15 y 25°C.. Parece ser que los 22ºC. es la mejor temperatura para su crecimiento. Igualmente, soporta muy bien aguas más o menos saladas: desde un 0,5% al 40% (la salinidad del mar es de 35%.). Por momentos, habita en agua dulce, remontando las lagunas y el curso inferior de ríos. Con la ayuda de redes, se las captura normalmente a 40 o 50 metros de profundidad, y muy excepcionalmente hasta los 100 metros. Es un pez que normalmente se le encuentra cerca de la superficie y en aguas de poca profundidad, a excepción de la temporada invernal que emigra a grandes profundidades de hasta los 100 metros arriba indicados. A alguna les gusta las aguas poco oxigenadas de los puertos, las salobres de los estanques y remonta los ríos costeros en varios kilómetros. Otras, ni siquiera dejan estas zonas para desovar en el mar durante el invierno. Se le pesca lo mismo entre rocas como sobre los fondos arenosos, pero a nuestra “amiga” no le gustan los fondos fangosos. Le encanta las aguas muy agitadas: olas, marejadas, corrientes. De una parte, le gusta alimentarse intensamente en períodos de tormenta, pero también le gusta la calma de los puertos o ensenadas litorales. Su gran fortaleza, su resistencia y la calidad de su carne, le hacen ser uno de los peces favoritos y más perseguidos por los pescadores aficionados, y en especial los amantes del surfcasting. Es habitual, que la lubina aceche a sus presas entre la espuma que forman las olas que rompen sobre las playas.
El tamaño legal de captura es de 36 cm para el Atlántico y de 23cm para el Mediterráneo. Hoy en día, muchos pescadores deportivos consideran que éstas dos distintas medidas debieran de unificarse en una, y elevarlas hasta los 42cm. por considerar que muchas de las lubinas que aún no han alcanzado ésta talla, tampoco han alcanzado su madurez, y, por consiguiente, tampoco han tenido la oportunidad de reproducirse.
Por Joaquin