Hemos Comido…en El Cenador del Capitán Palacio situado en el mismo centro de Potes en donde te puedes comer un buen cocico lebaniego hasta decir basta.
Se trata de un restaurante que está situado en la segunda planta de la Casa de las Cosas, en la plaza principal de la preciosa villa de Potes, en el centro de la maravillosa comarca de Liébana.
Al restaurante se accede, por un gran portal, subiendo unas escaleras que nos harán llegar a la segunda planta donde nos encontramos con un gran salón diáfano y con el techo abuhardillado.
El salón es amplio, cómodo, tendrá unas 16 o 18 mesas y desde él, en un rincón, podemos ver la cocina y observar como cuecen los pucheros. Está decorado en el estilo propio de la zona Al fondo del salón, hay una espléndida balconada que dá a la plaza. En esta zona del restaurante, hay unas mesas altas para tener muy buenas vistas.
Está decorado con útiles y aperos propios de la labranza, o de las antiguas cocinas. En sus paredes hay fotografías, cuadros y recuerdos de la zona.
En cuanto a su cocina, está dedicado a los productos típicos de la comarca. Famoso es su cocido lebaniego (especialidad de la casa), cocido montañés, el lechazo asado y las truchas de río, así como los postres de la zona.
Tienen dos menús a elegir:
MENÚ DEL PEREGRINO: Sopa de Cocido, Cocido Lebaniego (Garbanzos, Repollo, Tocino, Carne, Chorizo, Cecina, Costilla, Morcilla y Relleno) y de postre Canónigo. Se incluye el pan, vino y agua
MENÚ «EL CENADOR DEL CAPITÁN»: Ensalada de la Casa o Alubias con Chorizo a elegir y de segundo Carne Guisada con Patatas Fritas. De postre flan de huevo o helado. También incluye el pan, vino y agua.
El sitio esta muy bien llevado y como su nombre indica se situa en un desván decorado muy bonito y al que se accede por una escalera interna. Comimos garbanzos, sopa y compaño hasta decir basta, a los niños los situaron en una especie de reservado a parte, y se hicieron cargo de ellos. Había una amplia carta muy de cocina casera, de postre canónigos, también muy bien hechos y como es natural acompañando al postre un té del puerto y orujo. De precio muy bien, es más, barato. Atención tuvimos toda la del mundo y un servicio de calidad. Sus dueños Paco y Maite son ya conocidos desde hace años en el mundo de la hostelería de la zona de Liébana. Existe una zona en el desván para comer dos personas un tanto especial, para parejas, una mesa compartida con vistas, situada en el mirador. En resumen, un sitio a tener en cuenta en Potes.