Hemos desayunado en La Fama, la churrería más emblemática de Zaragoza
La Fama, situada en pleno centro de Zaragoza junto a la plaza del Pilar, es un referente indiscutible en la ciudad cuando se habla de churros y porras. Su popularidad no es casual: detrás de cada pieza hay técnica, producto y oficio.
El secreto de unos buenos churros


El churro tradicional se elabora con una masa sencilla de harina, agua y sal, trabajada hasta conseguir la textura adecuada para ser escudillada en forma de lazos o bastones. La fritura es el punto crítico: el aceite debe estar limpio y a la temperatura justa (alrededor de 180 °C) para lograr un exterior dorado y crujiente sin que la masa absorba grasa en exceso.

En La Fama, los churros destacan por su ligereza y por esa crujencia que se mantiene incluso al mojarlos en chocolate. Las porras, más gruesas y aireadas, requieren un reposo mayor de la masa para que al freír se expandan y queden esponjosas por dentro.
El chocolate y el café como acompañantes
Aunque el clásico es el chocolate espeso, elaborado con cacao de calidad y ligado con almidón para obtener cuerpo, muchos clientes optan por el café como alternativa. La combinación de amargor del café con el punto salino de la masa frita resulta equilibrada y menos dulce, ideal para quienes buscan un desayuno más ligero.


El ambiente y el servicio
Los domingos por la mañana, la barra y la terraza se convierten en un hervidero de clientes: familias, turistas y habituales que esperan su turno para llevar churros a casa o disfrutarlos al aire libre. El personal mantiene un ritmo ágil y cordial, demostrando que la hospitalidad es tan importante como la técnica en la cocina.

Por qué visitar La Fama
• Ubicación céntrica, a escasos metros de la plaza del Pilar.
• Producto fresco, elaborado al momento.
• Tradición y constancia en la fritura, que garantizan calidad uniforme.
• Posibilidad de encargar churros para llevar, una opción muy demandada en la ciudad.
En definitiva, La Fama es un lugar imprescindible para quienes quieran conocer la tradición del desayuno zaragozano. Su éxito se basa en la sencillez bien ejecutada: masa ligera, fritura limpia y un acompañamiento que convierte cada visita en un ritual.
Por El Mule
- 📍 Ubicado en: C. de Prudencio, 25, Casco Antiguo, 50003 Zaragoza
