Hemos Comido…en Agoncillo, en Chusmi, un lugar que para mí toma el relevo del área de servicio de la autovía a la altura de Logroño.
Este área fue durante muchos años punto de referencia gastronómico de la zona, pero de unos años a esta parte su caida ha sido en picado, mal producto en todos los aspectos y precios desorbitados,
Buscando un lugar cercano a este área me encontré con que en la salida a Agoncillo, a menos de un kilómetro, estaba Chusmi, un bar que abastece de pinchos y desayunos a un cercano polígono industrial y al tráfico de la general, más los que abandonamos a autopista en busca de algo decente.
La barra y el expositor me recuerdan a lo que fue mi anterior parada usual, donde podías desayunar tortilla, oreja, filetes de lomo, calllos y un largo etcétera. Además te sirven un café en condiciones (el del área, además de tener un precio de 3€ NO HAY QUIEN SE LO BEBA).
En esta primera parada opté por una tapa de oreja. Resultó estar muy buena, aún siendo recalentada. Me resultó una gozada de desayuno: oreja, café con hielo y zuno de naranja, zumo de verdad, no de esos que llevan años hechos y guardados en la nevera.
Así que terminé y seguí camino a Huesca con una sonrisa.
A la vuelta de Huesca, coincidiendo con la hora del desayuno, parada y fonda, pero esta vez bocata de lomo con piminetos. Buen pan y unos buenos pimientos, el lomo también merecía la pena.
Ya camino de casa, desayuno en uno de los pocos sitios a lo largo de la autovía Bilbao-Barcelona donde se puede comer algo, siempre fuera de la autovía, pues lo que hay a lo largo de la misma es un horror, no se salva ninguno.
Desayuno riojano, con alegría, lomo con alegrías, al lado tortilla con alegrías, más allá chistorra con alegrías. Está claro que La Rioja es un lugar alegre y que el Chusmi es un sitio donde se puede desayunar muy bien y con alegría.
Se nota que nos acercamos a casa la tortilla, mejora por momentos.