Hemos Comido…en el Restaurante Palmanova, en Laredo, situado en la Avenida de la Victoria, a medio camino de la Plaza del Carlos V y el Hospital.
Un estupendo restaurante a cuyo cargo está otro de los alumnos aventajados del I.E.S. Fuente Fresnedo, Raúl Cuesta, un enamorado de su oficio, que hace de la comida algo fácil y apetecible.
Llegamos con la hora justa y entramos en el bar de estilo rustico, con una decoración acertada. El local dispone de dos comedores, uno interior y una terraza cerrada y acristalada. Entramos a este segundo comedor y rápidamente nos atienden recogiendo la comanda.
El menú que nos ofrecen nos deja un rato decidiendo cada plato y después de debatir nos decidimos por una Ensalada Griega y por una Crema de Calabacín y de segundo a elegir entre una Merluza, Rodaballo, Bacalao y Solomillo, nos decidimos finalmente por probar carne y pescado, esto es Solomillo de Cerdo a la Pimienta y Bacalao al Ajo Arriero.
Cambiamos el vino por un Viña Sonsierra, crianza del 2009.
Nos sacan los primeros en una buena presentación, la Crema de Calabacín tenía una chorrito de aceite de Oliva Virgen por encima, unas gulas y gambas, haciendo que, de esperar una Crema de Calabacín y punto, se convierta mediante este maridaje en un sabroso primer plato.
La ensalada Griega, mezcla sabores vegetales y lácteos, rematando una salsa de yogur y haciendo un plato fresco y agradable, diferente a otras ensaladas.
Llegan los segundos y los esperamos con curiosidad después de catar los primeros, el Solomillo a la Pimienta está al punto, acompañado con Paratas y Pimientos, bien salseado.
El Bacalao tiene un aspecto espectacular y no puedo evitar el catar el plato de mi acompañante, no solo es la vista, el sabor es espectacular, esta buenísimo y la cama de pimientos y cebolla enriquece el plato junto al pimentón espolvoreado por encima.
Se ve que este producto en concreto, Raúl lo domina, estoy a punto de pedir otra ración aparte para mí, pero el menú y las raciones son correctas y no es necesario, asi un aliciente para repetir en este local.
De postre, también una gran variedad de posibilidades, como siempre cuando voy a comer con mi mujer, ella no toma postre y yo no tomo café, así que nos ponen un helado y Te Rojo.
El helado nos lo presentan en una pizarra y son dos bolas de helado, una de Yogur Griego y la otra de Te de Roca, con un toque de Mermelada. Rematamos la “faena” con un chupito de Orujo con Hierbas.
La factura nos sale 48 euros (30 de los dos menús fin de semana y 18 del Vino) al hablar posteriormente con Raúl, nos dice que los menús de entre semana son demandados, que suele preocuparse de la variedad y que tienen un precio de 12 euros.
Creo que vamos a volver a probar este otro menú y haber si tengo suerte y me desquito con ese Bacalao al Ajo Arriero que me ha dejado tan buen sabor de este local.
Buenas materias primas, excelentes acompañamientos, presentaciones correctas,… se nota que este cocinero hace lo que le gusta, buena nota para esta cocina, repetiremos.